martes, 17 de noviembre de 2015

Alimentación Ecológica

¿Qué es la alimentación ecológica?
Autor: Patricia Pamos 

En los últimos años se habla por igual del creciente deterioro del medio ambiente y del aumento del consumo de alimentos poco saludables derivados de le extrema industrialización. Como forma de intentar ayudar a disminuir estas dos situaciones va ganando terreno la denominada alimentación ecológica, caracterizada por estar compuesta de productos elaborados de manera natural, sin elementos artificiales y respetando el medio en el que se producen.

Muchas dudas son las que envuelven a esta creciente alimentación. Una de ellas, por ejemplo, es la confusión existente entre el término de alimentación ecológica, biológica y orgánica. Todos son sinónimos, por lo que al ver clasificados productos con cualquiera de los tres términos estaremos hablando de lo mismo. A continuación te hablamos de los distintos productos que existen y de la legislación que la regula.

Agricultura ecológica

Este tipo de agricultura es vista por muchos como una forma de volver a nuestros orígenes en el cultivo. Ésta da lugar a verduras, hortalizas, cereales y otros alimentos que se producen en terrenos libres de pesticidas y otras sustancias químicas. Además, las tierras de cultivo no se explotan al máximo, sino que se respetan los ciclos de regeneración. El cuidado del entorno es, por tanto, fundamental: la tierra no se agota y los acuíferos no se contaminan.

Los productos que se obtienen de esta agricultura, además, no pueden tener ningún tipo de modificación genética, por lo que los alimentos transgénicos no se consideran dentro de esta agricultura. Por todo lo apuntado se entiende que los alimentos obtenidos de esta forma son mucho más beneficiosos para la salud humana, además de que protegen tanto la salud de los agricultores como la biodiversidad.

Ganadería ecológica

A l igual que en el caso de la agricultura, se busca obtener carnes, huevos, leche y otros producto lo más naturales posibles. Para ello prima el respeto a los animales y al medio donde se crían para no alterarlo. Muchos son los que comentan que los alimentos de esta ganadería orgánica, así como las hortalizas y verduras biológicas, tienen un sabor distinto a los obtenidos de la manera industrial. Pero no está claro del todo que así sea.

Algunas de las cuestiones que se piden para el trato de este ganado es que sea, en su mayoría de la zona donde se críe para que tenga menos enfermedades; también, deben comer piensos orgánicos, nada transgénico y tener total disposición de pastos sin ningún tipo de fertilizante. Además, no se les debe dar ningún tipo de medicamento que les lleve a alterar sus ciclos reproductivos o de crecimiento. Y, por supuesto, deben tener una libertad mayor que en las grandes explotaciones.

La situación actual

En España, poco a poco, la demanda de este tipo de alimentación va en aumento, por lo que la oferta y variedad de productos que se ofrecen también está creciendo. Son ya muchos los comercios que disponen en sus estanterías de productos provenientes de la agricultura y ganadería ecológica. Identificarlos es sencillo: además de destacar su procedencia en su explicación nutricional van marcados con un logotipo de la UE o del propio país que lo corrobora y que garantiza que esos productos han pasado por un proceso completo de producción biológica.

Esta creciente oferta y demanda y la inclusión de algunos productos no biológicos como tales, ha llevado a que este tipo de alimentación se regule. Así, por ejemplo, desde el 1 de enero de 2009 contamos con un reglamento en el que se especifican las nuevas pautas para la producción, control y etiquetado de productos ecológicos.

Cada vez son más las asociaciones e iniciativas españolas para intentar aunar las fuerzas de los que elaboran estos productos ecológicos como, por ejemplo, INTERECO, asociación sin ánimo de lucro que engloba las autoridades de control de la agricultura ecológica de las comunidades, entre otros. Apoyándonos entre todos podemos hacer que el cuidado tanto del medio ambiente como de nuestra salud a través de lo que comemos sea posible.

La comida orgánica aporta beneficios al planeta y a su salud

por María R. Linares 

La comida orgánica no parece ser una moda pasajera. Se trata de un tipo de alimentación que protege la vida del planeta y la salud de los consumidores. En este sistema de nutrición, las frutas, legumbres y verduras orgánicas son cultivadas sin pesticidas y regadas con agua natural no tratada, es decir, no dañan de ninguna forma la tierra.

El ganado orgánico también recibe especial cuidado, goza del libre pastoreo.
En entrevistas anteriores con Crónica, la célebre chef Mónica Patiño, partidaria de la comida orgánica, explicó que a los animales no se les suministran hormonas para que crezcan más rápido, se les permite cumplir cierto tiempo de vida y después se les sacrifica de forma rápida para que no segreguen sustancias nocivas producto del dolor o el temor.

La comida orgánica va más allá de una posición ideológica frente al sacrificio de animales y el cultivo sin pesticidas “es un cambio en la conciencia de consumo para con tu cuerpo y para con el mundo”, aseguró Elena Aranda, cuya dieta se basa en productos orgánicos.

MÁS SALUDABLES. De acuerdo con un estudio de la Universidad de Emory, Estados Unidos, los productos orgánicos protegen a los niños de los pesticidas. Además, les aportan más nutrientes, ya que las frutas y verduras actuales contienen menos que las producidas hace 60 años.

El equipo de la universidad estadunidense analizó las muestras de orina de niños cuyas edades iban de los 3 hasta los 11 años, cuya alimentación se basa en productos orgánicos, y encontró que no contenían malation y clorpirifos, pesticidas de uso común.

Sin embargo, luego de que esos niños volvieron a ingerir alimentos convencionales, los metabolitos rápidamente treparon a 263 partes por cada mil millones, según el estudio dado a conocer a finales del mes pasado.
Otro informe que data del 2001, de la Britain´s Soil Association, analizó 400 estudios de investigación nutricional y llegó a la conclusión de que los alimentos orgánicos contienen más minerales y vitaminas.

En tanto, una investigación estadunidense más, realizada por el Journal of Agricultural and Food Chemistry, arrojó que las frutas y vegetales orgánicos tuvieron niveles más altos de antioxidantes, los cuales sirven para prevenir el envejecimiento prematuro e incluso el cáncer.

Por los beneficios, vale la pena el gasto

“Son más caros, pero es algo lógico, pues son alimentos tratados de forma distinta; sin embargo, también son más benéficos para el cuerpo; yo suelo recomendarlos a las personas que padecen diabetes, porque hay una marca que tiene alimentos endulzados de manera natural y que no alteran los niveles de azúcar de mis pacientes”, sostiene el nutriólogo Jesús Díaz.

Elena Aranda, amante de la comida orgánica, explica que estos productos sí son más caros. “En ocasiones cuestan el doble que un producto normal”, ya que mientras un litro de leche oscila entre los 8 pesos con 50 centavos, un litro de leche de soya orgánico puede costar hasta 16 pesos.

O bien, una bolsa de pan, parecida al pan de caja normal, cuesta entre 20 y 25 pesos, mientras que el pan normal no supera los 18 pesos.
“El sabor de los productos sí es diferente, son más ricos; en el caso de la leche, ésta es más suave, y en el caso del pan, es más seco; contiene más fibra, saben diferentes pero saben muy bien”.

Algunas marcas de comida orgánica que usted puede encontrar en supermercados comunes son, Food for life, Food Live y Bio. La primera y la segunda cuentan con leche de soya, carnes, lácteos, hortalizas y vegetales, en tanto la tercera tiene una amplia variedad de galletas y productos manufacturados con amaranto orgánico.
Green Corne y El pan Papalotl también son opciones para comprar productos orgánicos, ya sea procesados en forma de algún platillo o bien en su estado natural. 

Organic, en inglés o biologique, en francés. En español, se los denomina biológico, ecológico u orgánico y son sinónimos que se utilizan para designar los alimentos que cuidan tanto la salud de los consumidores como el equilibrio del medio ambiente en que se producen. 


En los últimos años se han hecho muy populares los alimentos llamados orgánicos, demostrando el interés de mucha gente por un cambio positivo en la alimentación y también la desconfianza en la seguridad y producción de los alimentos convencionales. 

Se consideran "orgánicos" aquellos alimentos, en general vegetales y frutas que en ninguna etapa de su producción intervienen fertilizantes, herbicidas o pesticidas químicos, así como tampoco en los suelos donde son cultivados.

Para algunos, la palabra "orgánico" significa nutritivo. Para otros significa alimentos más limpios y seguros; incluso, están quienes entienden por "orgánico" aquellos alimentos producidos sin causar polución o dañando lo menos posible el aire, la tierra y el agua.

En realidad las características positivas que se le atribuyen a los productos orgánicos son difíciles de establecer mientras no exista una regulación general. Por ejemplo para que la leche, sea considerada orgánica, en teoría la vaca debe estar alimentada 100 % con granos que no hayan sido tratados genéticamente ni fertilizados sus suelos. Así como tampoco deben recibir antibióticos u hormonas dichos animales.

Es muy difícil lograr producir alimentos que estén totalmente libres de pesticidas, debido a que en los suelos éstos permanecen largos periodos de tiempo en cantidades insignificantes o pueden contaminarse de suelos próximos a ellos. 

En pocos lugares del mundo se han determinado definiciones específicas para el uso del término "orgánico" así como tampoco el tiempo de espera que debe pasar desde la última aplicación de químicos en los suelos y el cultivo de un alimento sin ellos.

En la mayoría de los países no hay leyes que regulen el uso de los alimentos orgánicos. Esta ausencia de leyes y reglamentaciones tampoco le da al consumidor garantías de que el alimento que se vende como orgánico, realmente lo sea y también está expuesto a que comerciantes inescrupulosos vendan algo que realmente no lo es.

Las 4 Categorias segun Ley

El gobierno federal de los EE.UU. se encuentran en camino de promulgar una ley. Esta definiría a los productos orgánicos en cuatro categorías:

"100 % orgánicos": son aquellos productos sin ingredientes no orgánicos. 
"Orgánicos": para los productos con un 95 % de los ingredientes de tipo orgánico.
"Hechos con productos orgánico": para los productos realizados entre un 50 y 95 % con ingredientes orgánicos. 
"Productos con menos del 50 %": de los ingredientes orgánicos, se deberá especificar en cada ingrediente que sea orgánico. 

Este debe ser un ejemplo que debe ser tenido en cuenta de modo tal que la situación sea más clara y el consumidor pueda saber que tipo de producto elige.

Desde el punto de vista nutricional, en los alimentos orgánicos no se pudo demostrar ventajas sobre, el sabor, seguridad y valor nutricional, con respecto a los alimentos convencionales; desde el punto de vista económico su valor es mucho mayor, aproximadamente entre un 20 y un 100 %.

Desde el punto de vista legal, un producto orgánico es aquel que está certificado por una autoridad competente. En Argentina, la Cámara de Certificadoras nuclea a las empresas habilitadas por el Estado para tal fin. Y se define como orgánico un sistema de producción diferenciado cuyo resultado es un alimento libre de químicos y sustancias tóxicas reales o potenciales para la salud humana. 

¿Producen Enfermedad?

"Todos los alimentos deben ser inocuos, es decir, no producir enfermedad. Se busca que la sanidad sea perfecta y se le agrega la calidad. Entonces, se buscan las características alimenticias óptimas, las características organolépticas (sabor, textura y olor) y que tenga trazabilidad, es decir, seguir el alimento desde la semilla hasta la góndola; desde la gestación hasta la manufactura. Y eso es lo que se garantiza con la certificación orgánica", sostiene el doctor Roberto Rapela. Por lo tanto, para el consumidor la garantía de veracidad reside en el sello de los productos. 

"El sello certifica que el proceso de cultivo responde a la reglamentación de cultivo orgánico. El control es semestral y depende del producto, se toman muestras para laboratorio y se sigue cada una de las etapas de producción. A la vez actúa un comité independiente (expertos externos a la certificadora), y si el productor no cumple el protocolo, se le da de baja", señala Rapela.

La certificación

En la actualidad se producen todo tipo de alimentos bajo protocolos orgánicos: carnes, huevos, miel, aceitunas, azúcar, yerba mate, té, café, legumbres, frutas, hortalizas, vinos, aceites, lácteos, con toda la variante de derivados y formas de comercialización, por ejemplo, congelados, conservas, dulces, etc. Es decir, toda la producción agropecuaria y su correspondiente agroindustria.

Para obtener la certificación, cada establecimiento debe seguir y respetar pautas específicas:

• Mantener la biodiversidad: el cause de los ríos, la calidad del agua, la capa de carbono de la tierra, la flora y fauna originarias, es decir, las características y equilibrios naturales de cada lugar.
• Libre de químicos sintéticos. No están permitidos los pesticidas, herbicidas ni los transgénicos; las hormonas y antibióticos. 
• Está prohibido el encierro y el maltrato animal.
• Se usa fertilizante orgánico para los vegetales.
• Producción sustentable. Se busca el equilibro ecológico y un sistema de producción socialmente justo. El agente debe trabajar en un medio sano y con un mejor sistema de distribución de la riqueza.

Los beneficios

La cantidad de nutrientes es similar en los alimentos de producción convencional u ecológicos. En los vegetales, el valor alimenticio es similar. En las carnes, está comprobado que las orgánicas son más magras porque tienen menos grasa intramuscular.

El gran beneficio de los alimentos orgánicos es que están absolutamente libres de residuos químicos. No están permitidos los aditivos y conservantes (salvo los naturales); plaguicidas ni fertilizantes; tienen menos o nulos residuos de medicamentos veterinarios; no contienen hormonas; ni metales pesados (presentes en suelos y aguas) y no pueden ser irradiados.

"Muchos productos se irradian para matar los gérmenes y favorecer su conservación. Por ejemplo, carnes, congelados, conservas. Y si bien está demostrado que esa radiación no es altamente nociva, la conclusión final sólo el tiempo lo va a determinar", amplía Rapela. 

"El animal que se cría en forma natural (las pasturas frescas, forrajes y granos que consume también deben ser orgánicos) y sin estrés tiene características especiales. Su carne tiene más cantidad de vitamina E, que es antioxidante, y menos grasa intramuscular (porque no está inmovilizado) que produce menos colesterol en el consumidor", afirma.

Además, las carnes orgánicas no sufren de contaminación biológica, como ser el mal de la vaca loca (encefalopatía espongiforme bovina), la fiebre aftosa, la intoxicación con Escherichia coli (famosa en hamburguesas industriales), ni salmonelosis (en huevos y aves) ya que las certificadoras controlan la trazabilidad en los ganados.
La trazabilidad es el conjunto de procedimientos técnicos que permite identificar y registrar a un animal desde su nacimiento hasta el final de la cadena de comercialización en sus distintos cortes y subproductos.

"La discusión no pasa por 'orgánico versus convencional'. En el mundo actual, global, es muy difícil que se dejen de usar transgénicos y agroquímicos. Lo importante, es que la población, dentro de sus posibilidades, pueda elegir la calidad de los alimentos que consume", reflexiona Rapela.

Razones para consumirlos

Valor Nutritivo
Cultivados en suelos equilibrados por fertilizantes naturales, los alimentos biológicos son de mejor calidad por su contenido en vitaminas, minerales, hidratos de carbono y proteínas, por lo que son capaces de satisfacer el equilibrio de sus constituyentes.

Sabor
Sólo regeneradas y fertilizadas orgánicamente, las plantas crecen sanas y se desarrollan de mejor forma, con su auténtico aroma, color y sabor, lo cual permite redescubrir el verdadero gusto de los alimentos originariamente no procesados.

Garantía de Salud
Algunos pesticidas prohibidos en determinados países, debido a su toxicidad, continúan siendo utilizados en Uruguay. Los estudios toxicológicos reconocen la relación existente entre los pesticidas y ciertas patologías, como el cáncer, las alergias y el asma.

Agua Pura
La práctica de la agricultura ecológica, que no utiliza productos peligrosos ni grandes cantidades de nitrógeno -que contaminan y lesionan el agua potable- es una garantía permanente de obtención de agua para el futuro.

Suelo Fértil
El suelo es la base de toda la cadena alimentaria y la principal preocupación de la Agricultura Orgánica. Cualquier práctica de laboreo del suelo debe buscar la conservación de la fertilidad del mismo e, inclusive, mejorar su condición, en particular por el aumento del contenido en humus de las tierras aradas.

Biodiversidad
La disminución de la diversidad biológica es uno de los principales problemas ambientales de la actualidad. La agricultura orgánica preserva las semillas para el futuro, impidiendo, de este modo, la desaparición de algunas variedades de gran valor nutritivo y cultural.

Armonía
La agricultura orgánica respeta el equilibrio de la naturaleza contribuyendo a la preservación del ecosistema. El equilibrio entre la agricultura y la forestación y la rotación de los cultivos, permite la preservación de un espacio rural capaz de satisfacer a las futuras generaciones.

Comunidades rurales
La agricultura orgánica permite la revitalización de la población rural y restituye a los agricultores la dignidad y el respeto de los que son merecedores por parte de la población en general por su papel de guardianes del paisaje y de los ecosistemas agrícolas.

Educación 
La agricultura orgánica es una gran escuela práctica de educación ambiental. Ella representa un modelo de desarrollo sustentable en el medio rural realmente promisorio para todos los jóvenes que un día tomarán decisiones en la sociedad.

Empleo
Gracias a la dimensión humana que estos emprendimientos asumen en las prácticas ecológicas y la gestión adecuada de los recursos locales, los productos agroecológicos generan oportunidades de creación de empleos permanentes y dignos.

Futuro
Los productos agroecológicos son grandes innovadores que consiguen la combinación de prácticas tradicionales con las prácticas más modernas, desarrollando así técnicas que permiten evitar el empleo de agentes de polución del ecosistema agrícola. junto con otros productores orgánicos promueve el consumo de productos agroecológicos a través de un sistema de canastas a domic.

http://www.alimentacion-sana.com.ar/informaciones/novedades/organicos1.htm#5

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